«De cómo bambi se torno tigre»
Por primera vez en estos últimos cinco años, he visto al simpático arcángel de las sonrisas con el gesto agrio, contundente y torcido, mientras desgranaba su discurso elevando el tono de su voz en el Palacio de Congresos de Madrid. En aquel recinto, rodeado de todos los suyos, Bambi (tal y como pronosticó en su día Alfonso Guerra), fue más tigre que nunca.Aunque sus palabras componían el mismo mensaje grandilocuente, justo, igualitario y dulce de siempre, sus gestos y su rostro descompuesto decían otro mensaje, conduciendo la comprensión del oyente a otros significados bien distintos. Aquel: «El camino para transitar la crisis será social o no será» sonaba igual a insulto que los reproches que lanzó: «no aceptaré "chantajes" ni "cantos de sirena” cínicos». La fuerza e ira que, por primera vez, reflejaba su siempre angelical y sonriente rostro quitaba toda credibilidad a sus palabras. ¿Qué ha pasado para que Bambi se torne tigre? -pensé para mis adentros- ¡Dios mío que mal debe estar la cosa!
Muy dificil debe resultarle ya mentir descaradamente sobre la situacion económica sin que se le inmute el rostro.
ResponderEliminarComo decian hace poco en una tertulia radiofónica Zapatero y sus adláteres podrian valer como gobierno cuando la economía se mueve y todo va bien. Sin embargo con la que esta cayendo queda patente su inutilidad.
Ahora bien, que tenemos y tendremos Zapaterato para rato, tal y como se las gastan los votantes de este país y gracias a la inoperancia de la oposición.