«El cielo vestido de nubes»
Cuando la climatología nos obsequia con un frente lluvioso, aquí en nuestras tierras ocres de secano y cielo azul inmaculado, todo parece cobrar vida. Los ocres se tiñen de verde por la hierba o las siembras. El cielo, otrora azul y plano, se llena de volumen por las infinitas tonalidades que desde el blanco al gris medio nos ofrecen las nubes.
Este inicio de otoño el cielo nos ha premiado con la deseada agua y su acción generosa sobre las resecas tierras ha cambiado por completo el paisaje en unos días.
La fotografía que ofrecemos esta semana corresponde a una toma de esta misma mañana, muy cerca del Camino de los Franceses, el sol se cuela entre las nubes iluminando la sierra del Buey y los Hermanillos. Espero que la disfruten tanto como yo al tomarla.
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