Hace unos días un amigo me pidió le buscara en los Picachos de mediados de los 80 un artículo que siendo estudiante de COU había escrito junto a otro compañero. Fue entonces, buscando ese artículo, cuando me percaté que, de un modo u otro, llevo tres décadas en las que de un modo u otro no he hecho sino asomarme a los medios de comunicación, publicando imágenes, artículos o participando en programas de radio, televisión local y, ahora a través de este blog.
Todo comenzó a principio de los ochenta, de la mano del desaparecido conquense Rafael Herrero, por aquel entonces director de Caja Murcia y animador cultural de tertulias como la Rebotica de Peral auspiciada por Los amigos de Jumilla. En aquellos años, un grupo de chavales entorno a José Luis Gil, Juan Atº Soler, Fernando López (el de la Hidro) y Paco Muñoz (Paco Peces), habían conseguido del entonces Alcalde Dionisio González instalar una emisora de alcance local en la última planta del actual museo de estenografía, cuya entrada daba a la calle labor. Fue entonces, cuando comencé a participar en algunos programas de tertulia en aquella embrionaria Radio Jumilla de la mano de Rafael. Emisora que se constituyó en municipal años después y de a la que tuve el honor de dirigir en 1987.
En agosto de 1986 a raíz de la riada de Julio de ese año y de una exposición de fotografía sobre la misma en la sede de la Asociación de Amigos de Jumilla, comencé a colaborar asiduamente en su revista El Picacho, bien con artículos sueltos secciones continuadas como las de: Dedicado a Juan y Viaje hacia el Este. Colaboración que llego hasta Diciembre del 1996.
«son muy pocas las cosas de las que se puede hablar sin molestar a este o al otro; sin parecer esto o lo otro o sin que te claven mil y una etiqueta»
El Picacho, en sus dos décadas de vida, una al menos estuvo estrechamente vinculada a la mía. No en vano esta revista decana de la prensa local ha llevado como portada, en 28 de sus algo más de cien números de existencia, composiciones gráficas o fotográficas mías y, durante los años 1991/92, tuve el gusto de dirigirla.A finales de los 90 comenzó mi colaboración con Telecable Jumilla de manos de dos buenos amigos Semitiel y Juan Atº Soler con el que ya había colaborado en la emisora municipal en su célebre programa "Si yo tuviera una escoba". Más tarde con Mª José Martínez, María Pla Pérez y Luisa Santos en la continuación de este programa bajo el título de "La Escoba". Ya recientemente, desde Septiembre de 2009, comenzamos la más reciente de mis aventuras mediáticas "La Rendrija" uno de cuyos derivados indirectos ha sido este blog.
De ahí que , cuando ahora, vuelvo la vista atrás no puedo tener otra sensación que la de un cierto vértigo por la fugacidad del tiempo, por las horas dedicadas, por las alegrías y los disgustos que da el comunicar el decir y el hablar de las cosas de tu pueblo. Porque aquí, de soslayo, ahora que nadie nos oye, son muy pocas las cosas de las que se puede hablar sin molestar a este o al otro; sin parecer esto o lo otro o sin que te claven mil y una etiqueta. Aun así no dejo de sorprenderme a mí mismo, pues tras estos treinta años todavía me quede un trozo de piel pegado al cuerpo y sigo haciendo verdad el viejo dicho de que: "para estar vivo más vale que hablen de ti, aunque sea mal".
Tambien viene al caso El Quijote: "ladran, luego cabalgamos"
ResponderEliminarNunca falta un aludido en cualquier escrito o declaracion. Lo peligroso y triste es cuando el aludido es el poder. Nunca te ha faltado un poder que se diera por aludido y una oposicion que se alegraga. Las que entran por las que salen.
La conocida frase de "ladran, luego cabalgamos" no está en la inmortal obra de Cervantes.
ResponderEliminar