Ahora se habla de forma cursi de la «Hora azul» para designar lo que toda la vida hemos llamado el amanecer y atardecer. Desde siempre, cualquier fotógrafo o aficionado, sabía que en esos momentos del día hay una luz especial. Una luz suave, que no crea sombras duras pero que entra rasante por el horizonte destacando los volúmenes y relieves de edificios, paisajes y cuanto encuentra a su paso.
Los cielos adquieren un color azul intenso debido al resplandor que los primeros o últimas rayos de sol de ese día crean en las capas altas de la atmósfera, ocasionando que el nuevo apelativo de «Hora azul», sea cierto y haya alcanzado tan amplia difusión.
Técnicamente la «Hora azul» viene a ser los 30 minutos antes y después de la salida y puesta del astro rey. Si cualquiera de ustedes en ese intervalo diario cogen su cámara y el trípode y salen a disparar comprobarán personalmente lo que les cuento.
Las imágenes que les traigo fueron tomadas ayer tarde en la famosa «Hora azul» del atardecer y como pueden comprobar destacan los colores profundos del cielo sobre nuestra iglesia mayor de Santiago. Espero que les gusten y se animen a sacar las suyas.
PD.: La foto de la Gran Vía madrileña del pots sobre "El Corte Inglés, fin de ciclo" también es una foto «Hora azul»
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